Cuarta prueba del Open de Madrid en Becerril, circuito ya clásico que albergó el Campeonato de España en 2011, además de un Campeonato de Madrid y varios años una de las pruebas del Open de la comunidad. Recorrido muy duro y además muy técnico que premia a los bikers más puros y completos, se puede decir que es una carrera a la vieja usanza. Sin un momento de respiro, siempre al máximo pero rodeado de pinos y muchas piedras. En este envidiable entorno el equipo Calmera Tioga no pudo cosechar mejores resultados, con Marcos Moral manteniéndose en el podio expert (3er lugar) y Carlos Luengo consiguiendo la victoria en máster30, con doble premio, ya que volvió a vestir con el maillot blanco de líder cuando solo resta una prueba.
Como decíamos un circuito de gran exigencia física, pero también mental, pues no permitía un momento de distracción. Una carrera que ensalzaba a los mejores corredores, los más fuertes. Como viene siendo costumbre a las 12:30 se daba la salida a la tercera de las mangas con las categorías a las que pertenecen nuestros corredores.
Entre los máster30, después de unos minutos de tanteo, fue Carlos Luengo el primero en lanzar el ataque con la intención de ver como se encontraban los rivales. Al ser un circuito tan técnico, Carlos pudo distanciarse una quincena de segundos e ir marcando su propia trazada. Se notaba con buenas piernas así que decidió forzar en las subidas, mientras que en las bajadas iba con cuidado ya que un error podía pagarse muy caro. Así finalizó la primera vuelta, con Carlos escapado con cerca de medio minuto de ventaja sobre un grupo numeroso. Ante esta situación Carlos decidió mantener la misma táctica, las subidas todo lo fuerte que podía y las bajadas con precaución. Vio como la ventaja no solo no menguaba si no que iba en aumento, lo que le motivó para seguir sufriendo. Así pasaron las vueltas, y ya en la última se limitó a controlar a su rival más cercano para alzarse con una nueva victoria en el Open.
Entre el grupo de los expert, fueron tres los corredores que se distanciaron en la primera vuelta. Entre ellos Marcos Moral, quien no quería sorpresas en forma de tapones y tomó el mando de la carrera desde el inicio. Al paso por la primera vuelta, ya se dilucidó entre qué corredores se repartirían los trofeos, pues son los que más en forma están de la categoría. Marcos viajaba con un ritmo cómodo y esperando acontecimientos. Pero está vez la suerte no nos iba a sonreír, al inicio de la subida más larga del circuito Marcos perdía contacto de sus compañeros debido a los doblados, esto provocó que perdiera un tiempo ya casi irrecuperable, lo que hizo que Marcos sufriera un bajón psicológico y pensara más en mantener la tercera plaza que en volver a luchar por la victoria. Una pena, pues nuestro corredor se merece ya una victoria después de tantos podios seguidos.
Como comentábamos, la gran alegría final llegó con los resultados de máster30, ya que gracias a la combinación de los puntos nuestro corredor Carlos Luengo volvía a vestirse de líder. Algo muy importante para llegar a la última prueba siendo el hombre a batir, con la motivación más alta imposible. Este premio remarca la regularidad de Carlos, siempre entre los primeros espadas y nunca perdiendo el hambre de victoria.
